MONASTERIO EL ESCORIAL. ESPAÑA
El Palacio Real-Monasterio de El Escorial es un monasterio de la Orden de San Agustín, histórica residencia de la Familia Real Española y lugar de sepultura de los reyes de España. Está gestionado por el organismo público Patrimonio Nacional. Es una de las más singulares arquitecturas renacentistas de España y de Europa. Situado en San Lorenzo de El Escorial (Comunidad de Madrid), ocupa una superficie de 33.327 m², sobre la ladera meridional del monte Abantos, a 1.028 m de altitud, en la Sierra de Guadarrama.
Conocido también como Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, Monasterio de San Lorenzo El Real, o, sencillamente, como El Escorial, fue ideado en la segunda mitad del siglo XVI por el rey Felipe II y su arquitecto Juan Bautista de Toledo, aunque posteriormente intervinieron Juan de Herrera, Juan de Mijares, Gian Battista Castello El Bergamasco y Francisco de Mora. El rey concibió un gran complejo multifuncional, monacal y palaciego que, plasmado por Juan Bautista de Toledo según el paradigma de la Traza Universal, dio origen al estilo herreriano.
Fue considerado, desde finales del siglo XVI, la Octava Maravilla del Mundo, tanto por su tamaño y complejidad funcional como por su valor simbólico sobre la historicidad de Madrid y de España. Su arquitectura marcó el paso del plateresco renacentista al clasicismo desornamentado. Obra ingente, de gran monumentalidad, no sólo es un edificio de perfecta traza, sino también un enorme receptáculo de las demás artes.
Sus pinturas, esculturas, cantorales, pergaminos, ornamentos litúrgicos y demás objetos suntuarios, sacros y áulicos hacen que El Escorial sea también un museo. Su compleja iconografía e iconología ha merecido las más variadas interpretaciones de historiadores, admiradores y críticos. El Escorial es la cristalización de las ideas y de la voluntad de su creador, Felipe II, un príncipe renacentista.
El 2 de noviembre de 1984, en coincidencia con la celebración del cuarto centenario de la colocación de la última piedra, el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, reunido en la ciudad argentina de Buenos Aires, inscribió el Monasterio en la Lista del Patrimonio de la Humanidad, como "El Escorial: Monasterio y Sitio". Esta figura incluye el Monasterio y otros enclaves de realengo, la Casita del Príncipe y la Casita del Infante, ambas diseñadas por Juan de Villanueva para Carlos III.
Quedaron fuera de la nominación de la UNESCO otros conjuntos monumentales y parajes naturales fundamentales para la interpretación del Real Sitio, que Felipe II protegió con una Pared Real de piedra en seco. La Cerca de Felipe II tenía una longitud aproximada de 55 km. El 21 de junio de 2006, la Comunidad de Madrid declaró Bien de Interés Cultural los pocos tramos que se conservan de La Cerca de Felipe II.
A través del Consejo de Patrimonio Histórico Español, la Comunidad de Madrid ha solicitado ampliar la declaración de Patrimonio de la Humanidad al Territorio Histórico que delimitó La Cerca durante los reinados de Felipe II y Carlos III. Considerando que el entorno del Monasterio encierra grandes valores naturales, culturales y simbólicos, la nueva inscripción podría ser, "El Escorial: Monasterio, Sitio, Entorno Natural, Cultural y Simbólico". Esta inscripción contemplaría tanto la Convención para la Conservación del Patrimonio Natural y Cultural como la Convención para la Conservación del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Conocido también como Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, Monasterio de San Lorenzo El Real, o, sencillamente, como El Escorial, fue ideado en la segunda mitad del siglo XVI por el rey Felipe II y su arquitecto Juan Bautista de Toledo, aunque posteriormente intervinieron Juan de Herrera, Juan de Mijares, Gian Battista Castello El Bergamasco y Francisco de Mora. El rey concibió un gran complejo multifuncional, monacal y palaciego que, plasmado por Juan Bautista de Toledo según el paradigma de la Traza Universal, dio origen al estilo herreriano.
Fue considerado, desde finales del siglo XVI, la Octava Maravilla del Mundo, tanto por su tamaño y complejidad funcional como por su valor simbólico sobre la historicidad de Madrid y de España. Su arquitectura marcó el paso del plateresco renacentista al clasicismo desornamentado. Obra ingente, de gran monumentalidad, no sólo es un edificio de perfecta traza, sino también un enorme receptáculo de las demás artes.
Sus pinturas, esculturas, cantorales, pergaminos, ornamentos litúrgicos y demás objetos suntuarios, sacros y áulicos hacen que El Escorial sea también un museo. Su compleja iconografía e iconología ha merecido las más variadas interpretaciones de historiadores, admiradores y críticos. El Escorial es la cristalización de las ideas y de la voluntad de su creador, Felipe II, un príncipe renacentista.
El 2 de noviembre de 1984, en coincidencia con la celebración del cuarto centenario de la colocación de la última piedra, el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, reunido en la ciudad argentina de Buenos Aires, inscribió el Monasterio en la Lista del Patrimonio de la Humanidad, como "El Escorial: Monasterio y Sitio". Esta figura incluye el Monasterio y otros enclaves de realengo, la Casita del Príncipe y la Casita del Infante, ambas diseñadas por Juan de Villanueva para Carlos III.
Quedaron fuera de la nominación de la UNESCO otros conjuntos monumentales y parajes naturales fundamentales para la interpretación del Real Sitio, que Felipe II protegió con una Pared Real de piedra en seco. La Cerca de Felipe II tenía una longitud aproximada de 55 km. El 21 de junio de 2006, la Comunidad de Madrid declaró Bien de Interés Cultural los pocos tramos que se conservan de La Cerca de Felipe II.
A través del Consejo de Patrimonio Histórico Español, la Comunidad de Madrid ha solicitado ampliar la declaración de Patrimonio de la Humanidad al Territorio Histórico que delimitó La Cerca durante los reinados de Felipe II y Carlos III. Considerando que el entorno del Monasterio encierra grandes valores naturales, culturales y simbólicos, la nueva inscripción podría ser, "El Escorial: Monasterio, Sitio, Entorno Natural, Cultural y Simbólico". Esta inscripción contemplaría tanto la Convención para la Conservación del Patrimonio Natural y Cultural como la Convención para la Conservación del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.